La influencia de la leche donada no está clara

Según diversos estudios observacionales, los bebés prematuros nacidos antes de la semana 29 de embarazo que son alimentados con leche materna tienen menos probabilidades de sufrir enfermedades graves como sepsis o enfermedad inflamatoria intestinal (enterocolitis necrotizante) y tienen un mejor desarrollo neurológico que sus pares que fueron alimentados Fórmula infantil producida industrialmente.

En el caso de que las madres tengan poca o ninguna leche, tanto las organizaciones de salud pública como los expertos recomiendan la leche materna pasteurizada de donantes. Sin embargo, no está claro si esto es realmente más beneficioso para el desarrollo neurológico que los sucedáneos de la leche materna. Un equipo de investigación dirigido por Tarah T. Colaizy (Universidad de Iowa, Iowa City) investigó recientemente esta cuestión en un estudio clínico aleatorizado, doble ciego.

Estudio doble ciego con casi 500 bebés extremadamente prematuros

El estudio incluyó un total de 483 bebés prematuros que nacieron antes de la semana 29 de embarazo o que tuvieron un peso al nacer inferior a 1.000 g y cuyas madres no tuvieron (nutrición exclusiva, n = 114) o muy poca leche materna (primaria). nutrición). 

Luego, los niños recibieron leche de donante pasteurizada y enriquecida con nutrientes (n = 239) o fórmula (n = 244) hasta los 120 días de edad, muerte o alta. Se estandarizaron los alimentos básicos, es decir, los alimentos para bebés prematuros y la leche de donante, pero no se estandarizaron el inicio de la alimentación, la implementación del enriquecimiento de nutrientes y los protocolos de progreso.

No hay diferencias significativas entre la leche donada y la fórmula preparada

Entre los 22 y 26 meses de edad corregida, el desarrollo neurológico se evaluó utilizando las Escalas de Desarrollo Infantil y Infantil de Bayley (BISD). La escala de esta prueba oscila entre 54 y 155, y una puntuación de al menos 85 indica que no hay retraso en el desarrollo neurológico. Para las capacidades cognitivas, Colaizy y su equipo determinaron una puntuación BSID media ajustada de 80,7 para el grupo de leche donada y 81,1 para el grupo de alimentos listos para comer. La evaluación del desarrollo del lenguaje y de las habilidades motoras tampoco reveló diferencias significativas.

Más muertes, menos enterocolitis con leche de donante

Un total de 54 bebés murieron antes del seguimiento, 29 bebés (13%) habían recibido leche de donante y 25 (11%) habían recibido fórmula industrial. Los datos de los científicos estadounidenses también muestran que los niños alimentados con leche materna donada ganaron peso más lentamente: al final del estudio, estos bebés prematuros pesaban en promedio 143 g menos que sus pares que habían recibido fórmula preparada industrialmente. Sin embargo, hubo una clara diferencia en el criterio de valoración secundario "enterocolitis necrotizante". Los bebés prematuros del grupo de fórmula desarrollaron inflamación intestinal aproximadamente el doble de veces que sus pares del grupo experimental (9,0% frente a 4,2%).

Limitaciones del estudio de leche de donante

Una de las limitaciones del estudio doble ciego es que tuvo que interrumpirse antes de tiempo debido a la gran demanda de leche de donante. Además, Colaizy y su equipo no determinaron el tipo y la cantidad de leche que consumían los bebés prematuros antes de entrar en el estudio, por lo que su influencia no está clara. Tampoco se midió el contenido nutricional de la leche donada y cada centro manejó el manejo nutricional de manera diferente. Además, los autores señalan que la población prematura tenía niveles superiores al promedio de factores asociados con peores resultados de salud (por ejemplo, peor desarrollo neurocognitivo), como: B. seguro público o mala educación materna.

Fuente: Gelbe