Se ha demostrado que el sobrepeso y la obesidad están asociados con un mayor riesgo de mortalidad. Además de exacerbar muchos factores de riesgo cardiovascular, la obesidad en sí representa un factor de riesgo independiente de muerte cardiovascular. Sin embargo, mejorar la mortalidad en pacientes obesos es difícil porque pocas intervenciones proporcionan una pérdida de peso segura, clínicamente relevante y a largo plazo. Hasta la fecha, faltan ensayos clínicos aleatorios que demuestren claramente que las terapias para perder peso pueden influir positivamente en los resultados cardiovasculares o en la mortalidad por todas las causas.

Sin embargo, el ensayo SELECT (Semaglutide Effects on Cardiovascular Outcomes in Patients with Overweight or Obesity) demostró que la inyección subcutánea semanal de semaglutida (2,4 mg) en comparación con el placebo redujo las tasas de mortalidad, incluidas las muertes cardiovasculares, en pacientes con enfermedad cardiovascular preexistente y obesidad, pero sin diabetes, disminuyó significativamente. La coincidencia de la pandemia de Covid-19 durante el curso del estudio creó la oportunidad de examinar la influencia de Covid-19 en este grupo particularmente vulnerable de pacientes y examinar si la semaglutida podría reducir el riesgo de complicaciones y muertes relacionadas con Covid-19. Un subanálisis del estudio examinó el efecto de la semaglutida sobre la mortalidad por todas las causas, incluidas las muertes causadas por Covid-19. Los resultados de este análisis se publicaron en el 'Journal of the American College of Cardiology'.

Se evaluaron datos de más de 17.500 pacientes de 41 países

Sin embargo, el estudio SELECT incluyó a 17.604 pacientes de 45 años o más con un índice de masa corporal (IMC) de al menos 27 kg/m² y una enfermedad cardiovascular previa confirmada, como un ataque cardíaco, un derrame cerebral o una enfermedad arterial periférica (EAP). sin diabetes, aleatorizado. Los participantes recibieron una inyección subcutánea de 2,4 mg de semaglutida o un placebo una vez por semana. La duración media del estudio fue de 3,3 años y se documentaron continuamente las causas de muerte, los casos de Covid-19 y las muertes relacionadas.

De los participantes del estudio, 4.258 (24,2%) afirmaron tener Covid-19. En este grupo, la proporción de pacientes mujeres y aquellos con un infarto de miocardio previo fue ligeramente mayor que en la población general del estudio. Sin embargo, ambos grupos no mostraron diferencias significativas en cuanto a edad, función renal y valores de glucemia.

La semaglutida reduce la mortalidad por todas las causas y reduce las complicaciones relacionadas con Covid-19

Los participantes tratados con semaglutida tuvieron tasas de mortalidad más bajas en comparación con el grupo de placebo: el riesgo de muerte por cualquier causa se redujo en un 19 % en general (cociente de riesgos instantáneos [HR] 0,81; intervalo de confianza del 95 % [IC 95 %] 0,71–0,93), para las muertes cardiovasculares en un 15% (HR 0,85; IC 95% 0,71-1,01) y las muertes no cardiovasculares en un 23% (HR 0,77; IC 95% 0,62-0,95). Las causas más comunes de muerte cardiovascular en el grupo de semaglutida en comparación con el grupo de placebo fueron muerte cardíaca súbita (98 vs. 109; HR 0,89; IC 95 % 0,68–1,17) y muertes de causa desconocida (77 vs. 90; HR 0,85; IC 95%: 0,63–1,15).

Durante la pandemia de Covid-19, las muertes infecciosas aumentaron, y el grupo de semaglutida tuvo una tasa más baja que el grupo de placebo (62 frente a 87; HR 0,71; IC del 95 %: 0,51–0,98). Esto significó que menos participantes en el grupo de placebo corrían riesgo de muerte cardiovascular.

Semaglutida no redujo la incidencia de Covid-19; sin embargo, menos participantes que se infectaron con Covid-19 y fueron tratados con semaglutida tuvieron eventos adversos graves relacionados con la infección por coronavirus (232 vs. 277, p=0,04) o murieron a causa de la infección (43 vs. 65, HR 0,66, 95). % IC 0,44–0,96).

Pérdida de peso con semaglutida

En los pacientes que murieron por Covid-19, la pérdida de peso promedio en el grupo de semaglutida fue de 6,4 kg, mientras que en el grupo de placebo solo se perdió 0,9 kg. También hubo una clara diferencia entre los supervivientes: el peso disminuyó 8,4 kg en el grupo de semaglutida, mientras que sólo se perdió 1,25 kg en el grupo de placebo.

La obesidad debe tratarse como una condición médica grave

La semaglutida se ha mostrado prometedora, no solo en la pérdida de peso, sino también en la mejora de las posibilidades de supervivencia de las infecciones por Covid-19. Los resultados del estudio SELECT respaldan la idea de que la obesidad juega un papel importante en la gravedad de la Covid-19 y refuerzan la necesidad de tratar la obesidad como una enfermedad grave.

Fuente: Gelbe

Autor:  Dr. Christian Kretschmer